Urgente: El Gobierno interviene en el aumento de los combustibles, frena el 7% e impone el 4,5%

Las compañías petroleras planean aumentar los combustibles en un 7% a partir de las 0 horas del día de mañana. Sin embargo, el Gobierno ha intervenido y solo ha autorizado un incremento del 4%. Esto ha generado tensión entre ambas partes. El aumento se aplicará durante este fin de semana en las estaciones de servicio. Los expendedores argumentan que la inflación acumulada en 2023 ha alcanzado el 42.2%, mientras que los precios de los combustibles han subido un 23%.

Las principales petroleras del país, pretendían aumentar hasta 7% el precio de los combustibles durante el próximo fin de semana en todas las estaciones de servicio del país pero intervino el Ministro de economía Sergio Massa y advirtió que «Solo autorizará un aumento del 4,5% como máximo..

Algunas empresas tienen la intención de realizar un ajuste del 8% de una sola vez, el doble del 4% inicialmente previsto para mediados de junio y acordado con el Gobierno nacional en el marco de Precios Justos hasta el 15 de agosto próximo. En el interior del país, algunas marcas ya han aplicado un primer aumento y probablemente lo complementarán para llegar a un aumento final del 7% u 8%.

Originalmente, el ajuste promedio en los precios de las naftas y el gasoil iba a aplicarse al comienzo del jueves 15 de junio, con un aumento del 4%. Sin embargo, después de una serie de llamadas entre gerentes y directores, las compañías petroleras decidieron retrasar dicho ajuste y esperar al fin de semana para agregar algunos puntos adicionales. También querían conocer el dato de inflación de mayo, que según el INDEC fue del 7,8% mensual. Por lo tanto, se estima que el aumento será de entre el 6% y el 7%, según la empresa, y comenzará a regir entre el sábado y el domingo.

A diferencia de otras subidas, YPF, que controla el 55% del mercado de combustibles, sería la última en actualizar sus precios. La decisión de la compañía de mayoría estatal es esperar y observar el comportamiento y las acciones de sus competidoras. En el sector aseguran que esta estrategia laissez-faire (dejar hacer) les proporciona argumentos para seguir los pasos de los demás.

Los expendedores afirman que la inflación acumulada en 2023 alcanzó el 42,2% y los precios de los combustibles subieron un 23%. Además, advierten que la mitad de las estaciones de servicio en todo el país todavía no alcanzan el punto de equilibrio, que actualmente se sitúa en 330.000 litros mensuales. Desde Cecha, la confederación que agrupa a más de 4.800 estaciones de servicio, reclaman: «Estamos con la soga al cuello; la inflación y el retraso en los precios de los combustibles hacen insostenible mantener las estaciones abiertas. Necesitamos una solución».

En el Gobierno, rechazan los puntos adicionales de aumento, pero no detendrían la medida ni considerarían caído el pacto vigente. Admiten que las restricciones sectoriales impuestas por el Banco Central a las petroleras para acceder a dólares oficiales y poder importar combustibles premium desequilibraron el acuerdo de Precios Justos.

Este acuerdo busca que las compañías obtengan los dólares para comprar combustibles a través de un crédito en bancos locales. A cambio, el Banco Central emite un bono ajustado al valor del dólar. Los funcionarios reconocen que el costo de esta medida para las empresas es significativo: Argentina importa entre 5 y 6 cargamentos de naftas y gasoil por mes, lo que, a los precios actuales, representa un costo estimado de cerca de $270 millones de dólares.

Sin embargo, también se considera justificado otorgar un permiso a aquellas petroleras que lograron obtener financiamiento por un período de 90 días. Según los informes oficiales, argumentan que el aumento adicional del 3% en el precio mensual no alterará significativamente el panorama inflacionario general.