El proyecto YPF-Petronas del que hablo Royón en Diputados tiene fecha de inicio y apuran la Ley de GNL Todos los detalles.

La Secretaria de Energía, Flavia Royón, se presentó en Diputados y les pidió a los legisladores que avance el proyecto de ley de promoción del GNL. Explicó que solo un proyecto chico implica u$s6.000 millones en inversiones. Juntos por el Cambio realizó cuestionamientos y pidió cambios.

La secretaria de Energía, Flavia Royón, se presentó en la Cámara de Diputados para pedirle a los legisladores que acompañen el proyecto de ley del régimen de promoción del gas natural licuado (GNL). Informó que de aprobarse el marco regulatorio, el proyecto de YPF con la petrolera Petronas, de Malasia, “tiene la firme convicción de comenzar la licitación antes de diciembre de este año”. Solo ese proyecto comienza con una inversión de u$s10.000 millones y podría generar exportaciones por u$s15.000 millones. Sin embargo, anticipó que hay otros cuatro en estudio.

Además, Royón contestó los cuestionamientos de los legisladores. Rechazó que el proyecto de ley estuviera pensado solo para YPF-Petronas, explicó por qué aplicará solo para inversiones por un mínimo de u$s1.000 millones y por qué no contempla al sector del upstream. Desde la oposición, Juntos por el Cambio consideró que el proyecto es “clave”, aunque pidieron cambios, para que puedan ingresar a los beneficios mayor cantidad de empresas.

Que dice el proyecto de YPF – Petronas

YPF tiene como proyecto en conjunto con la empresa malaya Petronas una iniciativa en Argentina que tiene una fecha de inicio establecida y busca inversiones significativas. La planificación se extiende hasta el año 2026, momento en el que se espera alcanzar la plena producción.

Este proyecto implica la participación estratégica de Petronas, quien aportaría el 49% de la inversión para monetizar más de 500 pozos en la primera fase y alrededor de 2500 pozos en total. Esto representa menos del 11% de los recursos disponibles en el yacimiento Vaca Muerta, lo cual supone una auténtica revolución en la zona.

Además, se contemplan la construcción de tres gasoductos de 36 pulgadas (diámetro similar al GPNK) de diámetro con destino a Bahía Blanca, donde se llevaría a cabo la licuefacción y posterior exportación. Para ello, ya se han reservado 1.500 hectáreas de terreno en las proximidades del puerto. Para asegurar un avance rápido, será necesario establecer una base legal sólida que respalde este proceso.

La inversión total del proyecto es único y sin precedentes en la historia argentina, ya que la cifra es realmente abrumadora y ronda los 50 BI US$ escalofriante si se piensa en tan solo 15 años.

Para ello se prevé una infraestructura en plantas para el GNL en el puerto de Bahía Blanca para procesar el gas desde Vaca Muerta en el upstream es decir de superficie, y para ello es necesario avanzar con la ingeniería que llevaría el proceso con el objetivo de lanzar la construcción de los gasoductos para fines del 2023.

Se adelantó que ya se están trabajando sobre los permisos a superficiarios en los terrenos reservados y se espera que en el 2024 ya esté todo resuelto para comenzar con obras en ambas provincias, Neuquén y Buenos Aires.

Importancia

Antes de las preguntas de los legisladores, Royón expuso una presentación con los principales lineamientos del proyecto de ley e hizo énfasis en la importancia de su aprobación. Aseguró que en la actualidad Vaca Muerta «está solo desarrollado en un 8%”, y existe una «ventana acotada» en el tiempo para los hidrocarburos, siendo el gas el combustible de la transición energética: “Hay que pensar Vaca Muerta más allá del mercado interno y regional”.

Con infraestructura, el gas podría exportarse a países limítrofes, pero es mediante el GNL que podría llegar a cualquier país del mundo. Para eso, se requiere un marco promocional, afirmó Royón: “Son inversiones de capital intensivo, un solo proyecto chico requiere un mínimo de inversiones de u$s6.000 millones, y puede generar exportaciones por u$s2.700 millones”. Además, anticipó que las estimaciones globales esperan que la demanda de GNL “se duplique entre el 2021 y el 2050”, por la industrialización de los países emergentes, como China e India, pero también dijo que hay que a partir de 2040 hay “incertidumbre” sobre la demanda, por cómo habrá avanzado la transición energética.

Cuestionamiento de JxC

Al momento de las preguntas de los legisladores, Francisco Sánchez, diputado del Interbloque de Juntos por el Cambio, aseguró que su partido considera al proyecto de ley de GNL “clave para el desarrollo”, pero cuestionó: “No estamos conformes con que sea un proyecto restrictivo específicamente a una intención de inversión, específicamente a la que llegaría desde Petronas-YPF”. Pidió que en comisión pudieran realizarle modificaciones, como sumar a la promoción a inversiones menores a u$s1.000 millones, y que contemple al sector del upstream.

Royón contestó: “Para este proyecto no hablamos solo con YPF, sino con el 90% de los actores que existen en Argentina en el mercado del gas, y también con inversores extranjeros”. De hecho, comentó que hay al menos 4 proyectos que están en estudio: “Tuvimos conversaciones con Tecpetrol y Pampa Energía que tienen un proyecto. También cuando viajamos a China los empresarios nos preguntaron, y también lo hizo una empresa de Rusia”.

Además, reveló que la redacción del proyecto no tuvo en cuenta pedidos de Petronas: “El pedido original de las empresas era poder acceder al 100% de las divisas, pero hoy es muy complejo y se les explicó. Los requisitos de Petronas eran más ambiciosos de lo que quedó”. El proyecto de ley prevé que las exportaciones de las empresas promocionadas tengan un monto de libre aplicación de hasta el 50% de las divisas obtenidas.

Además, contestó que no se consideró al sector del upstream para que no convivan dos regímenes de promoción distintos, dado que en la actualidad ya existe un decreto que da beneficio de acceso a divisas a las petroleras cuando incrementan sus exportaciones. Y explicó que serán beneficiadas empresas con un mínimo de inversión de u$s1.000 millones debido a que en los proyectos las compañías deberán prever también el financiamiento de gasoductos para transportar. “Hoy la infraestructura está pensada para el mercado interno. Por eso la ley habla de pozos y ductos dedicados”, detalló Royón. Explicó que un proyecto «chico» podría requerir un gasoducto de la magnitud del Néstor Kirchner. De todos modos, afirmó: “Está bien que se discuta todo esto en comisión”.

También Royón contó que el pedido de las empresas era que el proyecto no tuviera retenciones, mientras que finalmente se definió un esquema móvil, según precios internacionales. “Hoy Argentina pasa por una situación muy complicada, así que los derechos de exportación fueron fruto de una negociación. Hubo consenso en que el precio de más de u$s20 por millón de BTU es un precio bueno, por eso ahí se paga, y debajo de los u$s15 el fee de licuefacción es acotado, por eso se puso en cero retenciones”.

Fuente. Con información de www.Ámbito.com – Elaboración Propia BDP –