El Gobierno brasileño impulsa la energía eólica marina y el hidrógeno verde a pesar del uso intensivo del agua

El Ministerio de Minas y Energía y la Oficina de Investigación Energética (EPE) de Brasil han publicado una nueva versión de la hoja de ruta de la energía eólica marina del país, en respuesta a las recientes actualizaciones del marco regulador de la generación de energía.

Según un informe reciente de Reuters, el Gobierno también tiene planes de establecer un marco regulador para la eólica marina y el hidrógeno verde a finales de este año.

La nueva hoja de ruta de la eólica marina ahora incluye consideraciones sobre la asignación de áreas federales para el desarrollo de la energía eólica marina, de acuerdo con la ley brasileña sobre regularización, administración, arrendamiento y enajenación de áreas (Ley nº 9.636/1998).

Esta hoja de ruta fue publicada por primera vez en 2020 y identifica un potencial eólico marino de 700 GW frente a las costas de los estados brasileños. Sin embargo, las estimaciones del Banco Mundial de 2019 sitúan el potencial técnico del país en 1.228 GW, con 748 GW de eólica flotante y 480 GW de fondo fijo.

Según un informe de Reuters del 27 de junio, el ministro brasileño de Energía, Alexandre Silveira, reveló que el Gobierno planea aprobar un marco regulador para la eólica marina y el hidrógeno verde a finales de este año.

Brasil dio un paso importante en el ámbito de la energía eólica marina el año pasado con la promulgación de un Decreto que permite la identificación y asignación de espacios físicos y recursos nacionales para el desarrollo de proyectos de energía eólica marina en aguas interiores, mar territorial, zona económica exclusiva marina y plataforma continental.

El país ha recibido un gran interés por parte de empresas energéticas para la construcción de parques eólicos marinos en sus aguas. Hasta la fecha, se han presentado 74 solicitudes de licencias de investigación ambiental relacionadas con proyectos eólicos marinos al Instituto de Medio Ambiente y Recursos Naturales (IBAMA), con una capacidad total propuesta de casi 183 GW.

Muchos de estos proyectos son propuestos por promotores europeos, incluyendo a las grandes petroleras TotalEnergies, Shell y Equinor, así como los promotores de eólica flotante BlueFloat y Qair. Además, la empresa brasileña Petrobras se ha asociado con Equinor.

El hidrógeno verde también está presente en algunas de las propuestas, como la de Neoenergia, filial de Iberdrola en Brasil, que planea construir parques eólicos marinos de 3 GW en tres estados brasileños, incluido Rio Grande do Sul, donde la empresa ya ha firmado un memorando de entendimiento con el Gobierno estatal para el desarrollo de la eólica marina y un proyecto de producción de hidrógeno verde.

Una de las solicitudes de energía eólica marina presentadas ante el IBAMA es de H2 Green Power, una empresa promotora de hidrógeno verde que también ha firmado un acuerdo con el Gobierno de Ceará para la producción de hidrógeno verde en el Complejo Industrial y Portuario de Pecém.

Qair, que también tiene planes de energía eólica marina en este estado brasileño, ha firmado un acuerdo con el Gobierno de Ceará para abastecer con energía eólica marina una planta de hidrógeno verde en el Complejo Industrial y Portuario de Pecém.