ENERGÍA
Sobre el límite, Argentina y Bolivia acuerdan seguir negociando el contrato del gas dos meses
Este lunes venció el último plazo para renegociar el contrato que incumple Bolivia. Para evitar una escalada se acordó una prórroga de dos meses.
GAS: Sobre el límite, Argentina y Bolivia acuerdan seguir negociando el contrato del gas dos meses.
Este lunes venció el último plazo para renegociar el contrato que incumple Bolivia. Para evitar una escalada se acordó una prórroga de dos meses.
El secretario de Energía, Darío Martínez.
Un minuto antes que descarrile la relación entre Argentina y Bolivia, ambos gobierno acordaron extender por dos meses el contrato de provisión de gas, vencido el plazo formal de la quinta modificación del contrato.
«Se va a firmar una extensión de dos meses para seguir negociando. Nos van a dar 7.5 metros cúbicos por día durante marzo y abril. Eso equivale a la mitad de lo que pedía Argentina», afirmaron fuentes al tanto de la negociación.
Las negociaciones se cursan a través de la estatal Yacimiento Petrolíferos Fiscales Boliviano y la argentina IEASA. Es decir, son de Estado a Estado en los hechos.
La última adenda al contrato que finalizó en diciembre, implicaba un suministro diario de 10,7 millones de metros cúbicos en verano y 18 millones de metros cúbicos en invierno. Estos volúmenes son a su vez una renegociación del contrato del 2020 que establecía un suministro diario todo el año de 21,3 millones de metros cúbicos diarios.
El problema no es el declino de la producción de hidrocarburos en Bolivia, lo que sucede es que ellos están privilegiando la relación comercial con Brasil.
La incapacidad de Bolivia para cumplir con la demanda de gas de Argentina data de 2006, y es consecuencia de la declinación de la producción de hidrocarburos en el país andino. Cuando en ese año se firmó el primer contrato, Argentina consumía 39 millones de metros cúbicos diarios de gas, volumen que en diciembre de 2021 aumentó a 41 millones de metros cúbicos diarios. De todos modos, el pico se registró en 2015 con un una demanda de 60 millones de metros cúbicos diarios.
«Según nuestras estimaciones lo máximo que puede enviar Bolivia durante este año apenas se acerca los 10 millones de metros cúbicos diarios», agregó una fuente del sector.
Para el Gobierno, la falta de abastecimiento de gas boliviano que abastece al norte del país donde no llega el gas de Vaca Muerte por falta de gasoductos, es un problema importante porque lo obliga a salir a buscar el faltante en el mercado a precios más alto y con un desembolso inmediato de los dólares que nunca alcanzan.
Desde esta necesidad, una fuente del gobierno que participa activamente de las negociaciones y conoce en profundidad la cuestión expresó con cierto enojo: «El problema no es el declino de la producción de hidrocarburos en Bolivia, lo que sucede es que ellos están privilegiando la relación comercial con Brasil».