ANÁLISIS Y OPINIONES
Sureda: Los proyectos de promoción de hidrocarburos y de movilidad sustentable ¿son complementarios o antagónicos?
En exclusiva para Boca de Pozo, José luis Sureda, experto en energía e hidrocarburos, nos plantea dos interrogantes sumamente interesantes.
En el medio de otra interminable campaña electoral, el Congreso se prepara para discutir 2 leyes de enorme importancia para el futuro nacional.
La primera es el proyecto de fomento a la producción, transporte, industrialización y exportación de los hidrocarburos. Esta iniciativa termina siendo una mezcla de incentivos impositivos, reconocimiento parcial del derecho de propiedad de las operadoras, notablemente de YPF, y regulaciones para estabilizar el precio del petróleo y el gas natural en el mercado interno desacoplándolos de los precios mundiales.
Más allá de las críticas que este proyecto merece la intención vale y, tal vez, su tratamiento en el congreso pueda darle la madurez que al proyecto le falta.
Lo más importante es que el proyecto de marras reconoce al desarrollo de los hidrocarburos como un puntal en el crecimiento nacional, especialmente del interior de nuestro país.
Casi simultáneamente el gobierno anuncia, y envía al congreso, una iniciativa para el desarrollo de la movilidad sustentable que, en el fondo, tiene el mismo objetivo que el proyecto anteriormente citado, es decir, impulsar el desarrollo nacional.
Guiándome por publicaciones especializadas, puedo decir que el esquema tiene similitudes con el proyecto primero citado.
Lamentablemente, allí terminan las coincidencias porque el éxito de uno solo puede significar el fracaso del otro.
El proyecto de movilidad sustentable establece que, al 31 de diciembre de 2040, solamente se podrán comercializar vehículos eléctricos, salvo para los casos que se determinen como excepcionales. Este punto es sensible para las dos iniciativas jurídicas en cuestión.
El paulatino crecimiento de los vehículos eléctricos hasta la fecha antes mencionada significa que la demanda de derivados del petróleo caerá de forma monótona creciente hasta hacerse virtualmente cero en 2041. Esta medida implica una caída gradual y sin respiro de la capacidad instalada de refinerías, oleoductos, tanques de almacenajes y, en suma, de toda la infraestructura de la industria y que tanto esfuerzo nos costó montarla.
Desde el punto de vista de la producción ¿quién invertirá en petróleo y, en buena medida también, en gas natural? Entonces ¿Qué pasará con las regalías y con las industrias asociadas al desarrollo petrolero? ¿Quién invertirá en proyectos de envergadura al amparo de la ley de promoción de hidrocarburos?
Las refinerías más pequeñas, como la de Huincul, o de Bahía Blanca, o San Lorenzo ya están en problemas para operar por su falta de escala económica, así que ¿Cómo se sostendrán?
YPF tiene un enorme activo de extraordinario futuro en Vaca Muerta ¿Cómo podría desarrollarlo sabiendo que cada día que pasa se achica su negocio?
Seguramente el mercado secundario automotriz también sentirá la obsolescencia regulatoria de los motores a combustión, así que la fabricación nacional caerá afectando a la economía del país. Y recordemos que la industria automotriz tiene un importante nivel de integración con el Brasil, entonces ¿Cómo impactaría dicha obsolescencia en el Mercosur?
Hasta el presente, los procesos de transición hacia la electromovilidad sustentable es patrimonio de las economías desarrolladas, todas ellas importadoras netas de petróleo. Más aún, en todos los casos tal dependencia externa en el abastecimiento de combustibles será inexorablemente creciente en el tiempo.
Bienvenido sea el desarrollo del Litio argentino y de la “nueva” industria automotriz nacional, pero no a costa de las otras potencialidades con que nuestro país ha sido bendecido.
Al final del día, Argentina contribuye apenas con el 0,6% a las emisiones globales de gases de efecto invernadero.
Por todo lo anterior, me parece que hace falta una mirada abarcadora, y basada en nuestra realidad, que “ponga en fase” ambos proyectos para evitar daños autoinfligidos.
José Luis Sureda para www.bocadepozo.com.ar